El cambio de milenio
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La Vanguardia, 17 de Febrero de 1999
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Cartas de los lectores
SALVADOR EURAS RIBAS. El Vendrell Profundamente traumatizado por la trascendental cuestión del cambio de milenio, de siglo y de la influencia matemático-temporal del año cero, y considerando:
Que nuestro 1999 se lo debemos al monje Dionisio, que en el siglo VI midió el paso del tiempo desde el nacimiento de Jesucristo.
Que bajo el papado de Gregorio XIII se aplicó un correctivo a Dionisio y que de un plumazo se suprimieron varios días del año 1582.
Que Jesucristo parece ser que nació entre 4 y 6 años antes de lo previsto por Dionisio.
Que Dionisio fijó el nacimiento de Jesús en relación con la fecha de fundación de Roma.
Que si Dionisio no tenía claro el nacimiento de Jesús seis siglos antes, cabe dudar que tuviera clara la muy anterior fecha de fundación de Roma.
Que menuda confianza ha de inspirar un calendario basado en la fecha del nacimiento de Jesús un 25 de diciembre... ¡que empieza a contar el tiempo el 1 de enero siguiente!, fiesta de la circuncisión, dando preeminencia al corte prepucial frente al corte umbilical.
Que lo único fiable es la falta de fiabilidad, que mal casan matemáticas con historia, y que todo es puro convencionalismo, un servidor ha resuelto celebrar la entrada del siglo XXI el próximo día 20 de mayo a las siete y media de la tarde. ¿Alguien se apunta?

 
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