¿Qué papel juega el azar en nuestras vidas? ¿Es su importancia mayor que la que habitualmente le otorgamos? Basándonos en nuestros conocimientos teóricos, ¿atribuimos supuestas causas  a fenómenos que en realidad son aleatorios? ¿Es nuestro conocimiento tan sólido como pensamos? Éstas son algunas de las preguntas que sirven de guía a este libro y a las que el autor quiere dar respuesta mediante el análisis de situaciones concretas, fundamentalmente centradas en el mundo económico y de las finanzas.

Nassim Nicholas Taleb, conocido internacionalmente por el éxito de su anterior libro El cisne negro, es matemático y ha dedicado gran parte de sus investigaciones al estudio de la incertidumbre y la probabilidad en temas económicos y en el comportamiento humano.

El libro no es un libro teórico, sino una sucesión de experiencias personales, sobre todo en el ámbito de los mercados financieros y de la bolsa, vividas y analizadas por el autor al trabajar como analista financiero y convivir y compartir ideas con numerosos expertos, profesionales y clientes.

Para el autor, no le damos en nuestra vida cotidiana, en el trabajo, en el éxito o el fracaso de determinadas empresas, la importancia que merece al azar. Muchas de las cosas que ocurren se deben al azar aunque nosotros nos esforzamos por encontrar causas que las justifiquen, causas que podamos deducir de nuestro conocimiento. Y es que solemos confundir la condición necesaria para que algo suceda, por ejemplo para lograr el éxito, con las causas que lo producen. Aunque las reglas de la lógica son claras, su aplicación a casos concretos deja mucho que desear.

En este libro se trata de la suerte, pero sobre todo de la suerte que no se percibe como tal, y que se manifiesta, como se nos dice en el prólogo, en la forma del “tonto con suerte”. Figura que, si en el campo de la ciencia es más escasa, abunda en el mundo de la política o en el de los negocios, que es el tema central del libro.

Se destaca la importancia de lo poco probable y sale a relucir una máxima que se puede aplicar también a otras ciencias: “las grandes ideas sobre el azar son contrarias a la sabiduría convencional”. Así se lamenta de que muchos de los resultados en probabilidad son contraintuitivos y por ello difíciles de defender y hacérselos entender a personas con poca formación matemática.

La matemática se muestra como una herramienta muy útil para analizar, no sólo los resultados finales, sino también las posibles trayectorias que podrían haber ocurrido. Las simulaciones Montecarlo nos ofrecen la posibilidad de ver cuántos intentos de un determinado suceso darían lugar, por ejemplo en el campo económico,  al enriquecimiento o a la ruina.

Y llama la atención sobre conceptos matemáticos sencillos – diferencia entre mediana y media, distinguir la probabilidad de la expectativa- que no son correctamente interpretados en las reuniones entre importantes analistas económicos. Aunque también, y a modo de contrapeso, pone de manifiesto que las técnicas de modelización matemática no funcionaron en el mundo de la economía. Es posible, afirma, que la matemática sea sólo de ayuda secundaria en el mundo real y no falta la referencia a la teoría del caos, según la cual una pequeña causa puede originar unos efectos enormes.

Aún siendo la economía el contexto general, no obvia una incursión en el ámbito de la filosofía de la ciencia en general, de la mano de Popper y ligada al problema de la inducción. Se muestra de acuerdo con la provisionalidad de las teorías científicas y retomando la idea central del libro insiste en que no hay que tomarse el conocimiento tan en serio. Que subestimamos la proporción de azar en casi todo.

El libro es, en definitiva, una llamada de atención sobre la importancia e influencia que tiene el azar en nuestra vida y, en particular, en la economía. Nuestra falta de conocimiento sobre el mundo de la probabilidad hace que atribuyamos a leyes económicas resultados que en realidad son explicables a partir de las leyes del azar. Dicho de otra forma: se confunde suerte con habilidades o conocimiento.

Y, analizando los procesos seguidos, adjudica muchos de los desastres financieros al desprecio de las probabilidades de que ocurran los sucesos raros.  Un libro que, presentando multitud de casos reales vividos por el autor, reclama un mayor conocimiento sobre el azar que permita analizar críticamente la realidad económica. Completamente recomendable, tanto para los aficionados a las matemáticas como para las personas con responsabilidades o intereses en el ámbito económico.