La cultura es literatura, música, escultura, pintura, cine, matemáticas... ¿Matemáticas? Por supuesto, aunque quizá la mayoría de la gente no la incluyera en esta lista si le preguntan a botepronto. Las matemáticas no sólo están ligadas a la cotidianeidad más pequeña, sino que han condicionado y marcado el devenir de la historia misma de la humanidad. Entre las ciencias, la matemática es la más antigua, surgida de la necesidad de contar y medir, y por eso relacionada desde el principio con los números, su principal representación.

Un ejemplo. La aritmética de origen hindú en cifras árabes (la que hoy usamos para sumar, restar, multiplicar o dividir) fue uno de los principales impulsores del comercio a partir del siglo XIII. En aquel momento, los mercaderes se hicieron sedentarios, hicieron de las ciudades el centro de vastas redes comerciales y ese sistema sencillo, con cifras árabes que incluían el cero, que sustituía a los complicados métodos grecolatinos basados fundamentalmente en el ábaco, reservado a unos pocos eruditos, facilitó enormemente las cosas. La forma de medir y pesar, las monedas, los aranceles, todo cambiaba entre ciudades, ni que decir tiene lo que variaba entre la India, China y Europa. Y fue la aritmética la que logró poner orden en tanto caos y consiguió conectar comercialmente todos los puntos del globo.

Este es uno de los contenidos que ofrece de La vida de los números, la exposición que se puede visitar en la Biblioteca Nacional hasta el próximo 10 de septiembre. En ella, se hace un recorrido a través de la historia de la humanidad por medio de los "objetos de ciencia que a través de los años se han convertido en obras de arte", asegura el comisario de la muestra, Antonio J. Durán, catedrático de la Universidad de Sevilla. Desde el Codex Vigilanus, del año 976, el texto más antiguo que se conserva con los números tal y como hoy los conocemos, salvo el cero, hasta tablillas administrativas sumerias. El arte de la escritura, según diversas teorías, nació hace más de 6.000 años en los desiertos de Sumeria (hoy Irak) y surgió para responder a necesidades comerciales. Aquellas primeras tablillas contendrían, pues, el número de ovejas que vendió algún pastor, o las jarras de vino o las ropas.

Durante siglos y siglos, los sistemas numéricos -egipcio, griego, maya..., hasta el arábigo- fueron siendo representados hasta el siguiente gran paso que dio la escritura: la imprenta. La exposición también muestra la evolución de los estilos de los tipos de representación numérica a través de incunables y post-incunables como los calendarios de Regiomontano, y la Cosmographia de Ptolomeo, con mapas coloreados a mano. Una gran cantidad de aritméticas mercantiles se publicaron nada más inventarse la imprenta (siglo XV). En estos textos también se recogía el cambio de monedas, cálculo de trueques, de repartos proporcionales, de intereses crediticios o letras de cambio. El primer libro de matemáticas impreso en España, de Francesc Santclimen, escrito en catalán en 1482, se puede ver en la exposición.

Diferentes representaciones históricas de personas contando con las manos, monedas, ábacos... Las piezas de la muestra, además de la colección de la Biblioteca Nacional, han salido de los fondos de la Biblioteca Capitular y Colombina de Sevilla, la Biblioteca de Catalunya, la del Monasterio de El Escorial, de la Universidad Complutense de Madrid y del Museo Arqueológico Nacional.

Esta exposición ha surgido con motivo de la celebración el próximo mes de agosto en Madrid del Congreso Internacional de Matemáticas, que reunirá a los principales expertos en la materia. La directora de la Biblioteca Nacional, Rosa Regás, dijo en la inauguración que esta exposición demuestra que las bibliotecas "atesoran la memoria de los pueblos". El comisario de la muestra, Antonio J. Durán añadió que han tratado de contar "la historia de la humanidad" utilizando "como excusa a los números". "Me gustaría que el que venga a la exposición aprenda algo nuevo sobre los números, pero sobre todo, algo nuevo sobre el ser humano", concluyó.

La vida de los números. Hasta el 10 de septiembre en la Biblioteca Nacional, Paseo de Recoletos 20-22. Horario: de martes a sábados, de 10.00 a 21.00; domingos y festivos, de 10.00 a 14.00. Entrada gratuita.