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La primera medalla de Atenas
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El País, 31 de Julio de 2004
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ANDALUCÍA
M. J. A. - Sevilla La sevillana Maite Peña ha ganado el bronce en las XLV Olimpiadas Matemáticas de la capital griega

Piense en esto. ¿Existe alguna potencia de 2 que al escribirla en el sistema decimal tenga todos sus dígitos distintos de cero y puedan reordenarse los mismos para formar con ellos otra potencia de 2? Puede intentar averiguarlo, pero la respuesta es que no existe tal número.
Maite Peña, estudiante de 17 años del colegio Portaceli de Sevilla tuvo que resolver cuestiones de este calibre a lo largo de la Olimpiada Matemática Internacional 2004, que terminó el pasado 18 de julio en Atenas. "Para solucionar este tipo de problemas no tienes porqué saberte un montón de fórmulas. Lo importante es tener imaginación para enfrentarte a ellos", dice la joven.

La Olimpiada Matemática Internacional es una competición anual destinada a alumnos de bachillerato de todo el mundo y a ella asisten unos 500 participantes de más de 80 países. Maite es tímida y le cuesta un poco hablar sobre su triunfo. Pero la medalla de bronce que luce, el único trofeo logrado por el equipo español este año, lo dice todo.

"Nos sorprendió desde el primer momento, cuando todavía estaba en 4º de ESO", dice Ramón Piedra, profesor titular de Álgebra en la Universidad de Sevilla y delegado de la Real Sociedad Matemática Española. "Maite tiene un profundo interés por los problemas y una gran intuición para resolverlos", continúa.

El secreto de esta joven es bien sencillo. Estudiar. "Al día dedico unas cuantas horas. Te quita un poco de tiempo los fines de semana, pero puedo ver a mis amigos". La preparación de Maite se completó con concentraciones de dos fines de semana junto a sus seis compañeros del equipo nacional. "Allí el trabajo es intensivo, ocho horas diarias", afirma Maite. El tiempo dedicado es corto si se compara con el de otros países con mayor tradición en competiciones matemáticas. "En Estados Unidos los estudiantes invierten años de preparación", continua la joven. Los países del antiguo bloque comunista mantienen altas cotas de participación y muy buenos resultados. "Por delante de países ,ricos, como España, se encuentran Moldavia, Vietnam o Kazajstán", dice el profesor Piedra "Son países con décadas de adelanto en este tipo de eventos. Nosotros no hemos sabido promoverlos suficientemente".

El matemático compara la formación de nuestros futuros científicos con el entrenamiento de los atletas. "Hace años los españoles apenas si ganaban medallas en las Juegos Olímpicos. Después de invertir tiempo y dinero en ellos los resultados mejoran. Con la ciencia es igual y Maite es un ejemplo. Debemos aprender a valorar el papel de la ciencia y la investigación, a reconocer su labor y a empezar a invertir en ella".

A Maite todavía no le preocupan demasiado estas cuestiones. Ella quiere trabajar en una empresa. "Me gusta la ciencia aplicada, no la investigación pura y dura". El próximo curso estudiará Ingeniería Industrial.

 

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