LA CRESTA DEL PAVO REAL. Las Matemáticas y sus raíces no europeas
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LA CRESTA DEL PAVO  REAL. Las Matemáticas y sus raíces no europeas
Categoría: Historia de las matemáticas
Autor:
George Gheverghese Joseph
Editorial:
Pirámide
Año de publicación: 
1996
Nº de hojas:
0
ISBN:
84-368-0975-0

El autor, un auténtico cosmopolita: hindú de nacimiento, criado en Kenia, de padres sirios cristianos ortodoxos, que estudió en Gran Bretaña y pasó algunos años de su vida en Tanzania... nos invita a quitarnos la venda europeista con la que habitualmente analizamos la historia de las matemáticas y nos anima a buscar sus verdaderas raíces allí donde se encuentren. Para ello suscita un amplio recorrido a través de diversas culturas que resulta fascinante tanto por las aportaciones al conocimiento de la génesis de diversos pasajes de las matemáticas como por la curiosidad que despierta el descubrir rincones insospechados dentro de su propia historia. Nos incita así a desprendernos del chovinismo típico de cultura dominante (tan sólo en estos últimos cuatrocientos años) con derecho a escribir e interpretar la historia a nuestro antojo.

Todo ello permite desmontar algunas concepciones parciales de nuestra propia realidad cultural. Entendiendo la palabra propia en el sentido restringido en el que se dice cultura occidental, árabe, oriental, gitana, etc. Por ejemplo: se acepta con absoluta naturalidad una visión, que el autor denomina «eurocéntrica clásico», de cómo las matemáticas se han desarrollado a lo largo de la historia y que se podría esquematizar de la siguiente forma:

Grecia (600 a.C.-400d.C) -->

Edad Oscura (400-1500) -->

Redescubrimiento del saber griego -->

Renacimiento -->

Desarrollo del saber europeo

Autores tan notables como Kline en 1953 o Rouse Ball a principios de siglo aceptan a Grecia como el origen de las matemáticas, en una concepción egocéntrica que olvida a toda la matemática egipcio (2000 a.C.), de la que es deudora indiscutible la matemática griega, la mesopotámica (1500 a. C.), la china (1500 a. C.), la precolombina o la india (800 a.C.). Se infravalora igualmente la importancia de la matemática árabe que fue protagonista, tan indiscutible como olvidada, de toda la «Edad Oscura». Pero los estudios se amontonan y empiezan a ofrecer pruebas acerca de las múltiples conexiones entre unas y otros civilizaciones que es necesario incorporar a nuestro conocimiento de la historia de las matemáticas.

De paso no estaría mal que esta nueva visión se trasladara a las aulas. Es importante que los adolescentes aprecien cómo el predominio cultural en matemáticas ha dependido de la época que se esté considerando y, sobre todo, que entiendan hasta que punto somos deudores unos y otros del empuje cultural de cada civilización en cada momento histórico. Quizás no consigamos desmontar algunos prejuicios tales como considerar que diferentes implica superiores y que pobreza es sinónimo de incultura o, lo que es peor, de impostura moral. Pero es posible que contribuyamos de algún modo a aumentar el respeto hacia las demás culturas y aprendamos de paso a considerar a sus miembros en un plano de igualdad.

No estaría mal recuperar la memoria colectiva de esos pasajes de la historia de la ciencia que han quedado fuera de nuestros marcos de referencia (bien por el desinterés de quien los escribió interesadamente o por razón de otras dificultades técnicas asociadas a su estudio) al tiempo que recobramos la noción de universalidad cultural, aprendemos a valorar la riqueza que conlleva el mestizaje o cuando menos apreciamos la importancia de las aportaciones de otros pueblos al diseño de «nuestra propia» identidad cultural.

«El interés por la historia nos marca de por vida. La forma de vernos a nosotros y a los demás, viene dada por la historia que asimilamos [...]. No es sorprendente, pues, que los gobernantes a lo largo de ella hayan reconocido que controlar el pasado es dominar el presente, y de esa manera consolidar el poder». Ese es el valor que el autor concede al conocimiento histórico, de ahí la precisión y el afán de objetividad que domina toda obra, y que a la postre se trasluce como una necesidad personal. Él mismo reconoce que le preocupa sobremanera mantener un equilibrio entre sus cuatro herencias culturales para que ninguna de ellas prevalezca sobre las demás.

La sobriedad del relato y la humildad que destila desde sus primeras páginas le resta apasionamiento y le aporta una seriedad de estilo que conjuga muy bien con la exquisitez con la que trata de ser objetivo, aun a costa de sacrificar interpretaciones que a la lógica resultan clarividentes.

Es posible leer el libro como una novela, de un tirón, sin otra pretensión que la meramente divulgativa, pero también resiste una lectura más sosegada. Sobre todo si la información que aporta se pretende comparar con la que aparece en otros manuales sobre el tema o se piensa en cómo trasladarla al aula.

(Reseña aparecida en la revista SUMA no. 26, 1997)
 Materias: Divulgación, las matemáticas en diferentes culturas, matemática egipcia, mesopotámica, griega, china, árabe, europea, precolombina, india
 Autor de la reseña: Carlos Usón

 
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